Un espacio de lectura y reflexión sobre Gestión Empresarial y Liderazgo. Y si quieres todavía más… todos los JUEVES a las 16:20 (GMT+1), en CAPITAL RADIO, mi sección "QUIERO SER UN BUEN JEFE"
Hace un año y medio decidí publicar mis historias de liderazgo. Desde el 2007 escribía un diario sobre las experiencias que, en mi rol de directivo, me habían aportado algún aprendizaje. Respuestas. Pero, sobre todo, preguntas. Porque el verdadero aprendizaje reside en las preguntas que nos hacemos, en los dilemas que nos genera la gestión de personas en nuestro día a día.
No quería que fuera un diario al uso, donde la propia memoria dulcifica las situaciones con saldo a nuestro favor. No quería que se limitara a un mero relato en el que yo apareciera como un directivo fantástico y maravilloso incluso en mis actuaciones más mezquinas. En estos ejercicios autobiográficos tendemos con frecuencia a la autojustificación.
Quería que otra persona, con amplia perspectiva y experiencia en el ámbito de los Recursos Humanos, analizara críticamente mis actuaciones. Alguien que me diera la réplica, una persona que demostrase conocimiento e independencia ante mis posibles intentos (conscientes o no) de autojustificación. Una visión diferente y fresca, no condicionada por mi vivencia personal. Y fue así como, tras una intensa búsqueda entre mis conocidos personales y en las redes sociales, sin prisa pero sin pausa, me topé con un blog llamado Descubriendo Talento (http://isabeliglesiasalvarez.com). Su creadora, Isabel Iglesias, volcaba reflexiones semanalmente con mucho criterio, con mucha razón y, sobre todo, con mucha emoción. Me prendé intelectualmente de su fondo y de su forma, de sus puntos de vista expuestos con un lenguaje sencillo y directo. Me decidí a contactar con ella.
Tras un intercambio de pareceres a través de e-mail, nos llamamos por teléfono y decidimos que el proyecto valía la pena y disponíamos de la suficiente motivación para llevarlo a cabo. Fijamos un calendario y nos disciplinamos para cumplir con el objetivo de escribir un libro con el que cualquier profesional que gestione a personas pudiera conectar y sentirse reflejado y apoyado.
Entrar en contacto con Isabel Iglesias fue una inmensa fortuna personal y profesional, surgida de esa maravilla tecno-sociológica que son las redes sociales. Ella y yo somos un ejemplo de que hoy en día se pueden construir cosas conjuntamente sin necesidad de vivir en la misma ciudad, en un plazo relativamente corto.
Y de ahí surgió EL DILEMA DEL DIRECTIVO (www.eldilemadeldirectivo.com), publicado por LID Editorial.
La primera vez que nos vimos en persona fue el día en que nos reunimos con la editorial para hablar sobre el contrato de publicación. Sí, ya sé que esta forma tan poco habitual de gestar un libro suena a guión cinematográfico, pero así fue. La realidad supera a la ficción, o como mínimo la iguala. Así que si me está leyendo algún guionista de cine o teatro y necesita una buena y bonita historia para basar su próxima creación, que se ponga en contacto con Isabel y conmigo. Prometemos no dejar indiferentes y plantear un caché razonable.
En EL DILEMA DEL DIRECTIVO se complementan dos elementos: por una parte, la visión del responsable (directivo, mando intermedio, etc) sobre situaciones de su día a día complejas de gestionar; por otra, la perspectiva de la persona experta en Recursos Humanos.
Sé que no es fácil acertar con la fórmula que cada cuestión suscitada en el día a día por nuestros colaboradores o empleados requiere para ser gestionada con éxito. Es posible que no exista una sola fórmula para una situación dada. Lo que es seguro es que siempre existe alguna, por difícil de llevar a cabo que sea.
En mi rol de liderazgo acumulé aciertos pero también acumulé fracasos. Estoy seguro de que tú, lector y colega profesional, cometes errores y fracasas también. Muchos o pocos, qué más da. Que lo perciban los otros o que solo tú seas consciente, qué más da. Lo importante es lo que aprendes de ellos. Y si no aprendes nada, cuidado! Corres el peligro de la inanidad o de la necedad. Vigílate y ten siempre a alguien a tu lado para que te cante las verdades del barquero.
A veces actúas con mezquindad. Otras con bonhomía. No eres un demonio, pero tampoco un santo. No eres un santo, pero tampoco un demonio… ¿O quizás sí? En todo caso, la cuestión no es ‘ser’ sino ‘comportarse como’. Tú eliges en cada momento tu comportamiento. ¿Recuerdas cuántas veces has actuado llevado por decisiones testiculares u ováricas? ¿Qué resultados te han proporcionado en el corto plazo? Sí, ya lo sé, posiblemente rápidos, ¿pero también buenos? ¿Se han mantenido en el medio y largo plazo, o has acabado exhausto para mantenerlos?
Yo he sentido miedo, mucho miedo: a equivocarme, a perder mi status, a perder apoyos. ¿Has sentido miedo? Claro que sí! No me mientas! Lo has sentido, y mucho. Lo sentiste cuando estaba en tus manos aquella decisión que podía representar un gran salto para tu empresa si todo salía según lo planeaste, pero un gran desastre si salía mal; o cuando aquel colaborador que siempre te ha sacado las castañas del fuego pierde motivación y temes que los resultados de tu departamento o de tu empresa se resientan; o cuando tu jefe te deja solo ante el peligro e intuyes que serás inmolado si algo va mal; o cuando la colaboración interdepartamental no es buena y te ves sólo, tirando de un carro que necesita más arrieros para llegar a su destino. Hay tantas y tantas cosas que nos atemorizan, verdad?
En EL DILEMA DEL DIRECTIVO (www.eldilemadeldirectivo.com) encontrarás estas situaciones y muchas otras. Si mis vivencias y el análisis certero de Isabel Iglesias te ayudan a mejorar tu labor de gestor de personas, nos daremos por satisfechos.
Un cordial saludo,
Daniel Sánchez Reina
Sigue mi blog: http://lideragora.net
Sigue mi canal Youtube: http://goo.gl/FRaoSM
Sígueme en Twitter: https://twitter.com/DanielSnchezRna